''Y LO QUE DESCUBRÍS, LO DESTRUIS IGUAL
Y LO QUE ENCONTRÁS, LO ENTERRÁS IGUAL
Y CUANDO ME MATAS, TE MATAS DE LA RISA
Y CUANDO APAGÁS LA LUZ TE DESARMÁS.''
Mirá que andar diciendo que no por mentiras como vos no es poca cosa. Al final de cuentas la noche se prestaba, che. Si te cuento te vas a reír tanto que mejor me lo guardo un rato más, así cuando yo lo entienda nos reímos juntos.
Tirá la piedra que tiene que caer en el dos... ¡No! Línea de nuevo no... Pensar que la otra noche estaba tan oscuro y sin embargo casi embocás en el tres, che, y andabas tan rápido, ni vos te entendés. Ahora que te entra luz por la ventana escupís afuera de la palangana, una locura.
Pobre Babilonia, le tocó un Sèvres bufón, un violador de noches de invierno, una bala perdida. Un delicuente disfrazado de héroe que no la va a llevar hasta el final de la avenida.
Reaccioná (qué difícil que es volver a accionar). La situación es clara, a bajarse del tablón que el viento sopla para un solo lado y los clavos ya están donde tienen que estar hace rato.
Es medio cuentero, me dijeron, pero mirá que decirle que no... una pena...
Y LO QUE ENCONTRÁS, LO ENTERRÁS IGUAL
Y CUANDO ME MATAS, TE MATAS DE LA RISA
Y CUANDO APAGÁS LA LUZ TE DESARMÁS.''
Mirá que andar diciendo que no por mentiras como vos no es poca cosa. Al final de cuentas la noche se prestaba, che. Si te cuento te vas a reír tanto que mejor me lo guardo un rato más, así cuando yo lo entienda nos reímos juntos.
Tirá la piedra que tiene que caer en el dos... ¡No! Línea de nuevo no... Pensar que la otra noche estaba tan oscuro y sin embargo casi embocás en el tres, che, y andabas tan rápido, ni vos te entendés. Ahora que te entra luz por la ventana escupís afuera de la palangana, una locura.
Pobre Babilonia, le tocó un Sèvres bufón, un violador de noches de invierno, una bala perdida. Un delicuente disfrazado de héroe que no la va a llevar hasta el final de la avenida.
Reaccioná (qué difícil que es volver a accionar). La situación es clara, a bajarse del tablón que el viento sopla para un solo lado y los clavos ya están donde tienen que estar hace rato.
Es medio cuentero, me dijeron, pero mirá que decirle que no... una pena...